Unas cabañitas en plena playa con todas las comodidades. El alojamiento me gustó mucho, estaba todo muy limpio y se nota que le hacen cierto mantenimiento que le hace tener ese aspecto de limpieza. Las cabañas están muy bien equipadas, nevera, aire acondicionado, toallas, manta para la cama, hervidor con Milo y Café para consumir, botellas de agua de cortesía, artículos de aseo disponibles incluyendo cepillos de dientes. Ofrece todo lo que ofrecería un hotel de una categoría superior. Sí que es cierto que tienes que tener en cuenta que la cabaña en plena playa está muy cerca de la selva por lo que encontrarás bastantes insectos y algunas lagartijas por la habitación y muchos sonidos durante todo el día de todos los animales que te rodean. Sí que es cierto que en la habitación encontré ahuyentador de mosquitos, que lo prendes y el olor espanta los mosquitos además de un par de botes de insecticida. En resumen, una cabaña en la playa con todas las comodidades para unos cuantos días de relax. La zona de la playa en la que está el alojamiento sí que es verdad que no es la mejor para el baño, tiene mucho coral muerto en la orilla, pero con caminar un poco hacia el centro de la playa ya mejora. En cuanto al servicio, sí que noté un trato algo frío y seco, solo se limitaban a lo que preguntabas y no se presentan tan serviciales o dispuestos a ayudar. Es de las pocas pegas, no tienen una actitud muy hospitalaria. En cuanto al restaurante acudí porque había leído muy buenas críticas y la verdad es que para mi no fue mi restaurante favorito de Juara. Las cantidades eran algo pobres y el servicio es el mismo que el de el alojamiento y se muestran fríos y distantes. De hecho si entrabas y no preguntabas nadie te decía que tomaras asiento ni nada por el estilo, estando yo allí comiendo llegaba gente que al ver que no le decían nada se iban.

Se alojó en abril de 2025

Es un paraíso para disfrutar de unos días de paz al lado del mar... El alojamiento es sencillo pero cómodo y limpio, el personal es super amable, te recogen y te llevan al puerto y desde allí puedes contratar un tour alrededor de la isla para hacer snorkel. El restaurante ofrece comida variada y deliciosa, además te abren una cuenta y puedes pagar al final de la estancia con tarjeta. Muy recomendable.☺️

Se alojó en septiembre de 2024

Todo perfecto. Limpieza, comunicación, servicios, lugar maravilloso.

Se alojó en agosto de 2024

Comida, situación

Se alojó en julio de 2024

El wifi no llegaba a los últimos bungalows y no te dan opción y lo estrictos que son con los horarios (un poco raros) de las comidas y cenas. Pone un horario y no se cumple del todo. Llegamos un día a cenar 30 minutos antes de cerrar y nos dijeron que no nos servían la cena, con todo el mundo comiendo alrededor. Como no hay mucha opción, a veces, si no llegas temprano, no cenas por que está lleno. La playa siguiente, además de más bonita, tiene más servicios, tanto para comprar comida, como para cenar.

El trato por parte de los responsables fue inmejorable, atentos, cercanos y siempre dispuestos a ayudar. El chek-in es sencillo si lo pactas con ellos por wassap, por que moverse por la isla es complicado. No hay alquiler de coches y alquilar un moto es complicado por las carreteras, tremendamente empinadas y con curvas imposibles (yo llevo moto y no me vi con ánimos de alquilar una y no se veía a turistas con ellas....para cruzar la isla, si para ir en la misma costa de playa en playa, pero es plano). Lo de ir en bicicleta no se lo cree nadie. Todo es a base de taxis 4x4 y no es económico (todo el rato hablo de cruzar la isla, para poder ir a otras playas). El hotel está cuidado y bastante nuevo. En la mejor zona de la playa de Juara, alejado del muelle y al lado de la selva. Los bugalows tienen de todo lo necesario, están cuidados y están justo delante de la playa. El wc está correcto, la cama grande y cómoda, con nevera y hervidora. No hay armario cerrado, pero si uno abierto y el aire acondicionado funciona bien. Hay ventilador también. El lugar de la recepción tiene buen wifi (enfrente de la playa) y es donde se come. No hay casi sitios donde comer en Juara, el hotel es una buena opción, bueno y bien de precio (en la playa de al lado hay bastantes más lugares y con más diversidad). Las excursiones que tienen están bien de precio y son interesantes, valen la pena. El mejor lugar en la playa de Juara, alejado del resto y con la playa para uno mismo.

Se alojó en agosto de 2023

No entran a limpiar en una semana. Si no pides toallas y papel no lo recambian. El restaurante no cumple el horario de comidas y cenas. Cierran cocina 1 hora antes de su cierre.

Caseta privada con baño privado y aire acondicionado. Dentro de la arena en primera línea de playa. El restaurante muy bueno y muy barato.

Se alojó en agosto de 2023

En frente de la playa, cabañitas con lo básico pero limpias y súper cómodas . Se desayuna y come maravillosamente tanto la comida local como otro tipo . El Perdonal un 10 siempre ayudándonos y haciendo q nuestra estancia fuera increíble Nosotras volveríamos definitivamente si quieres desconectar y vivir en plena naturaleza súper recomendado Y las excursiones q te ofrecen geniales

Se alojó en junio de 2023

No hay nada que no me gustara como tal, aunque como punto negativo diría que el servicio en el restaurante es demasiado lento, aproximadamente 1 hora desde que pides hasta que te sirven, aunque más allá de que te rujan un poco las tripas, no es un problema ya que el estilo de vida en la isla es tranquilo y no hay prisa, así que relájate y observa la maravillosa playa mientras esperas. Por otro lado, no entran a limpiar las habitaciones ni a reponer aguas, papel higiénico, etc, pero hay una escoba en la habitación para poder barrer la arena, y si pides que te den toallas nuevas y papel higiénico te lo dan sin problema. tampoco hay sábana para cubrirte por la noche, lo cual para mi no fue un problema porque llevaba pareos de sobra, y justo nos llovieron dos dias y por la noche refrescaba, aunque normalmente no te hace falta la sabana

La ubicación es maravillosa, está al final de la preciosa playa por lo que es una zona tranquila, pero al mismo tiempo cerca de todo. El personal es agradable y atento. El servicio de transfer tanto para ir al hotel como para volver fue estupendo. El restaurante está bien de precio y la comida está bien. Nosotros nos quedamos en el chalet familiar y la verdad que es bastante grande y tiene una terracita en la parte de delante con unos sillones muy agradables para sentarte a observar la maravillosa playa. también puedes tumbarte en las hamacas que hay justo enfrente, aunque si las palmeras están llenas de cocos, mejor tener cuidado :) en resumen, repetiría sin duda.

Se alojó en abril de 2023

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Se alojó en agosto de 2025

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Se alojó en julio de 2025

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Se alojó en julio de 2024

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Se alojó en julio de 2024