Opiniones del Riad Nirvana

Después de mucho tiempo esperando por este viaje, por fin conseguimos ir a Marrakech. Reservamos en el Riad Nirvana porque nos llamó la atención el nombre y las fotos nos parecieron una preciosidad. Además, queríamos estar en una zona tranquila, alejada del Soco pero desde la que pudiéramos ir andando a cualquier parte de la ciudad. Decidimos aceptar el taxi que nos ofreció el Riad y Jean Pierre, el dueño, nos estaba esperando en la llegada a Marrakech. Encontrar los Riads no es tarea fácil, así que agradecimos muchísimo este detalle. Nada más abrir la puerta nos dimos cuenta de que habíamos acertado de pleno reservando este lugar. Nos recibieron con una limonada y pastelitos que devoramos. Desde el primer momento nos sentimos como en casa. En el patio se respira tranquilidad e historia. El sonido de la fuente y el cantar de los pajarillos que transportan a un mundo casi mágico. La habitación estaba impecable, decorada con un gusto exquisito e impoluta. Todas las personas que trabajan en el Riad te reciben con una sonrisa enorme dibujada en su cara y el desayuno fue como un sueño. Tuvimos algún problema con las tarjetas y Jean Pierre fue sensible y empático con la situación, nos calmó y se ofreció a ayudarnos con sinceridad absoluta. Al final todo se solucionó, pero estar en un país extranjero y sentir que puedes contar con alguien en caso de tener un problema es increíble. Le recomiendo a todo el mundo que pase, al menos, una noche en el Riad Nirvana y que disfrute de la maravillosa compañía, el ambiente relajado, el frescor de su patio, el silencio y la tranquilidad de su terraza superior, las sonrisas de Jean Pierre, su esposa y todo su equipo. No se arrepentirán. ¡No vemos la hora de volver!

Me encantó TODO.

Desayuno muy completo. Habitación cómoda.

La ubicación, el desayuno y la hospitalidad de los dueños Jean Pierre y Anna.

El trato de Azir, encantador. La comida y la estancia . También la ubicación. Super chulo

El ruido cerrojo de las puertas de otros clientes

Todo perfecto, Aziz el anfitrión ha sido muy amable y disponible todo el tiempo. El desayuno era espectacular. Y la posición del Riad en una zona muy tranquila para el descanso.

Una estancia perfecta en el corazón de Marrakech – Riad Nirvana Nuestra experiencia en Riad Nirvana ha sido simplemente excepcional. Ubicado en la medina de Marrakech, este riad ofrece una combinación perfecta de tranquilidad, comodidad y una ubicación estratégica con fácil acceso, algo que se agradece enormemente en el ajetreo de la ciudad. Desde nuestra llegada, el trato fue impecable. Aziz Ouabi, el responsable, es un auténtico profesional que se encarga de que cada detalle esté cuidado al máximo. Su hospitalidad y atención hicieron que nos sintiéramos como en casa desde el primer momento. Nos ofreció recomendaciones locales muy útiles y siempre estuvo disponible para cualquier necesidad. Las habitaciones del riad son acogedoras, limpias y decoradas con un estilo tradicional marroquí que aporta un ambiente auténtico y relajante. La cama era cómoda, y el nivel de limpieza y mantenimiento era impecable. Uno de los puntos fuertes del riad es su terraza, un espacio ideal para relajarse después de un día explorando la ciudad, disfrutando de un té a la menta con unas vistas magníficas. Además, los desayunos fueron deliciosos, con productos frescos y típicos de Marruecos, lo que hizo que cada mañana comenzara de la mejor manera. Si buscas un lugar con encanto, bien ubicado y con un servicio excelente en Marrakech, Riad Nirvana es una elección acertada. Gracias a Aziz y su equipo por hacer de nuestra estancia una experiencia inolvidable. Sin duda, volveremos!

Todo. Nos hemos sentido como en casa y eso ha hecho que hayamos podido disfrutar mucho más de nuestra estancia en Marrakech

Nada

El desayuno es excepcional! Realmente fue la primera impresión que tuvimos de Marrakech y comenzar por los sabores autóctonos con un desayuno casero, fue grandioso. Todo en Riad Nirvana se nota que fue hecho con cuidado, amor y dedicación. Es un hotel chico de pocas habitaciones, con atención personalizada y muy buena calidad. Los dueños son muy atentos y están en todos los detalles para que disfrutes de tu estadía de la mejor manera. Si disfrutas de llegar a una ciudad nueva y poder hablar con las personas que viven ahí, conocer las recomendaciones de los locales y sentirte parte de ese lugar, te recomiendo que te quedes en Riad Nirvana.

Nada.

El alojamiento es precioso. Además, aunque la ubicación sea muy céntrica está en una zona muy tranquila. Y qué decir del trato que recibimos, Jean Pierre y Anna nos hicieron sentir como en casa, y la atención a nuestras necesidades por parte de Aziz, Gislaine y Khraula fue excepcional. Muchisimas gracias a todos.

El desayuno espectacular, había de todo, y preparado con mucho mimo, la cama muy cómoda, el Riad muy tranquilo y acogedor, muy buena ubicación, y al lado de todo, el anfitrión nos cuidó muchísimo, pendiente siempre de cada detalle, nos ayudó con todo. El agua de la ducha muy calentita. Servicio de taxi a muy buen precio.

Nada que no nos gustase en nuestra estancia, todo excelente, repetiría sin dudarlo.

El desayuno en la terraza, espectacular!! Jean Pierre y su mujer, cercanos y hospitalarios, nos hicieron sentir como en casa.

Nada

Riad excelente… todo limpio, buen ambiente, el personal muy atento y buen trato en especial Jean Pierre q siempre busca ayudarte en cualquier cosa, nos ayudó mucho q hablase español y nos pudiésemos comunicar con él sin ningún problema… Los desayunos son excelentes!

Todo!! El lugar es un sueño

Instalaciones estupendas y muy limpias Amabilidad del dueño, nos recomendó muy buenos sitios para comer Desayuno muy completo

Todo fue muy bueno

Fue la primera vez que estuve en un Riad en Marruecos, no conocía este tipo de alojamiento pero fue muy agradable mi estancia por tres noches, la habitación muy cómoda para descansar con el típico estilo de las casas en Marruecos.

Los anfitriones muy atentos en todo momento con cualquier cosa que necesites

El desayuno bastante bueno. Las habitaciones también.

No nos esperaban ni tenían registrada nuestra reserva el recepcionista (que no estaba ). Lo peor fue que llegamos a las 2:30 am , lo cual avisamos previamente, y nadie nos abría. Con 2 niños esperando 1 hora fuera de madrugada…

Hospitalidad del personal (Aziz), limpieza, ubicación, el desayuno.

Los pájaros que te despiertan por la mañana :-)

Personal muy amable. Lugar muy limpio y acogedor.

Lo que me gustó mucho fue el recibimiento de Azid, es una grandisima persona. Nos puso un té buenisimo y unas pastas tipicas Además nos explico todo el plano de Marrakech con muy buenas recomendaciones de restaurantes, sitios importantes...etc... El recibimiento fue de 100. El desayuno es muy completo y te preparan cosas tipicas de alli. En el Riad hay una terraza en la azotea perfecta para tomar algo o tumbarse en las tumbonas. La ubicación es muy buena, está cerca de una zona tranquila donde tomar algo

Nada

El desayuno súper rico y el personal del hotel muy majo y atento.

El riad es precioso, la decoración está cuidada al detalle, es cómodo, tranquilo y extremadamente limpio. El baño privado de la habitación es precioso y grande también. La ubicación es muy buena: está dentro de la medina pero alejado de las zonas más bulliciosas. Sin embargo, en unos 10 minutos andando se llega a la plaza Jemaa el-Fna y en apenas 2 minutos a las tumbas Saadíes o a la puerta Bab Agnaou. Aziz nos dio una cálida bienvenida y nos explicó todo lo necesario para movernos por la ciudad. También nos ayudó con el taxi de vuelta al aeropuerto, nos hizo sugerencias y nos solventó algunas dudas muy satisfactoriamente. El desayuno no es de buffet, pero tiene de todo, es abundante y está buenísimo.

Por poner algún pero, en momentos puntuales se escuchaba salir a los otros huéspedes de sus habitaciones y si aún estabas dormido o descansando te dabas cuenta.

Riad Nirvana es un lugar fantástico. El trato por parte del propietario es muy cercano y amable, ayudando en todo lo posible. También destacar el trato de Aziz, quien nos sirvió los desayunos siempre con una sonrisa. Los desayunos son excepcionales: pan, bollería, huevos, zumo natural, café y té… El lugar es muy cómodo, las habitaciones muy completas y la ubicación es perfecta, a 10 minutos de la plaza de Jma el Fnaa, pero con la tranquilidad necesaria para descansar y estar alejado del ruido.