Opiniones del Capital Guesthouse Budapest

Muy linda y limpia, bien ubicada

Que no tenga personal para recibirte

La ubicación

No funcionaba la nevera de la habitación y no iba la televisión.

Tenía limpia mi habitación

Tiene la recepción en un sitio alejado del alojamiento y no se asesoran de que allá mando del aire en la Habitacion pero la chica de recepcionista, me pudo solucionar y su amabilidad es estupenda

Miuy bien ubicado.

Lo que no me gistó es que tuve que ir los las llaves a un sitio y luego trasladarme a otro.

El día del check in no hubo nadie que me abriera la puerta, llame varias veces y no contestaban, pésimo servicio

Una habitación perfecta para viajar solo

Un poco pequeña

Ubicación y el precio-calidad

No te cambian las toallas ni prácticamente te limpian la habitación.

La ubicacion

Bastante grande la habitación en relación con lo que se paga. Tenía cocina y aunque no contaba con hornillas sí que tenía una máquina para hervir agua y microondas, además de un par de utensilios básicos para comer.

Si haces uso a la vez de todos los enchufes, se sobrecarga y se va la luz. La ubicación en cuanto al centro de la ciudad no estaba mal pero la zona daba un poco de respeto por la noche ya que se encuentra en una calle oscura y muy poco transitada.

agua caliente en la ducha

La habitación estaba sucia con pelos en la bañera y telarañas en el techo. paredes muy finas que se escucha todo y la habitación cerca de la cocina, lo que implicaba que si alguien se despertaba temprano a desayunar no podías dormir más. no teniamos luz durante dos mañanas seguidas y la calefacción no funcionaba en ocasiones o estaba muy baja. pedimos cama de matrimonio la cual nos confirmaron y al lelgar teniamos 2 camas pequeñas.

La ubicación del alojamiento, estaba en pleno centro.

LEED LAS RESEÑAS DE GOOGLE!!! Para empezar, la ubicación que te especifica en la aplicación que te mandan descargar, está mal, tienes que buscar el nombre directamente en Google Maps. Para seguir, nos mandaron a un edificio que estaba en pésimas condiciones, donde no puedes entrar si no entra o sale alguien porque se necesita un código para llamar al timbre de recepción ( cosa que no te explican antes). Para seguir, conforme ibas subiendo al edificio daba miedo seguir (no se veía casi nada porque era de noche y no había luz); una vez llegada a la recepción, te mandan para el verdadero alojamiento, que es otro edificio ubicado a 5 minutos andando. Una vez llegas al portal, más de lo mismo, un edificio casi en ruinas que mete miedo y para acceder a la habitación es un laberinto, que tienes que ir abriendo puertas adivinando con qué llave de las 5 que te dan (ni la misma chica nos supo decir cuál abría cada cosa). Entras, y hay una pequeña cocina compartida con el resto de habitaciones (cosa que tampoco especifican en ningún sitio); y la habitación en fin, sin sábanas, solo te dan una especie de edredón fino fino con funda con manchas que no salen ni después de lavarlas. Limpieza inexistente, ya que nos quedamos 3 noches y no nos cambiaron ni las toallas ni una sola vez. Lo único el precio, que nos salió la noche a 13€, y no puedes pedir peras al olmo, pero una experiencia curiosa.