Opiniones del Tamar Guest House

El jardín, la familia (Eta y su hija Ana) encantadoras. Las facilidades para tomar un té y limpiar el coche. Cerca de un supermercado, de un parque muy agradable y del centro

Los muebles de la habitación son tipo abuela

La ubicación.

La habitación cuenta con un ventanuco, no tiene aire acondicionado y no te ofrece ni un ventilador. La ducha no funciona bien. Muy poco recomendable si vienes en verano.

Una habitación muy cómoda, con baño, todo muy limpio, y un patio lleno de plantas. La señora muy agradable y hospitalaria.

La dueña

Dieron nuestra habitación a otra persona y cuando llegamos no había, nos acabaron cobrando extra por una habitación

La habitación era grande te espaciosa. Los propietarios son amables.

No estaba muy limpio y el baño necesita una reforma.

Tamara es muy amable, e intenta ayudar a sus huéspedes, nos permitió hacer el check in mas temprano, y nos ofreció una habitación mucho mejor a la que habíamos reservado por un poco más de dinero. Habitación y baño cómodos. Buen Wifi. La ubicación es muy buena. Relación precio/calidad muy buena.

Habitación un poco fría. La cocina es muy pequeña y poco equipada. Hay muchas cosas en los muebles de la habitación.

La dueña nos ayudó con los desplazamientos y alguna recomendación. Es lo único que se salva.

Al final del pueblo, a desmano, nos dieron una habitación “mejor” que la reservada en la que había una cama doble y una simple. Se le comentó de preparar la simple para uno de los otros así como del desayuno del día siguiente. Pues bien, ni una cosa ni la otra. Las instalaciones están muy desgastadas, más bien sucias y el baño dejaba muy mucho que desear (conste que hemos estado en más de diez establecimientos de este precio en Georgia en este viaje).

El patio es muy bonito. No está mal ubicado y está bien de precio

El lugar es un poco raro. Además, cuando llegamos, la mujer se quejó de que Booking le quitaba una comisión para darnos pena y que le diéramos más.

Antes todo quiero recalcar el trato ideal de su propietaria, siempre atenta y servicial. Es lo único que me gustó del sitio. Y le doy esa puntuación por ella.

El primer lugar estaba todo muy sucio. Había unas 5 arañas grandes en mi habitación y un montón de hormigas en la de mi padre. Debajo de la cama una colilla apagada. Las sábanas olían a pies. Mi hijo no pudo dormir en la cama individual porque se clavaban todos los muelles y tuvimos que dormir los 3 en la de matrimonio, Las fotos no se corresponden para nada con lo que es el alojamiento. El patio lleno de trastos viejos y oxidados a vista de todos. Nos coincidió que se alojaba un equipo de boxeo y la cocina estaba empantanada. Yo lo entiendo, pero no tengo la culpa de que no pueda casi ni cocinar porque no esté recogido o esté todo lleno de basura. Daba asco coger un cubierto o un trapo. Sinceramente no entiendo la puntuación.. y mira que me conformo con poco

La señora es encantadora y muy amable, la casa es muy bonita.