Opiniones del CPH Hotel 3 estrellas

La atención de las personas que están en recepción ,en especial a Daniel.

La atencion de la persona que estaba en la sala de desayunos .

La situación és inmejorable y el personal muy amable.

En las fotos parece que la piscina va incluida con la habitación pero se tiene que pagar aparte.

La habitación es muy grande y el personal muy amable. Hay un chico español en recepción, lo que facilita mucho las cosas.

El soporte de la ducha estaba suelto y al coger la ducha se le cayó a mí pareja al pie haciéndole una herida. Eso no debería haber estado así. Lo arreglaron en seguida y el recepcionista fue muy amable pero no pueden tener las cosas así. El desayuno es muy básico y solo hasta las 9.30 entre semana. Se escucha muchísimo el ruido del tren, que pasa justo en frente. Llevad tapones si os molesta el ruido y no queréis despertaros al alca cuando empiezan los trenes.

Habitación grande y cómoda. El desayuno bueno. Cerca de todo.

Nos tocó una habitación que da a las vías del tren y fue bastante ruidoso.

Muy bien ubicado y muy limpio.

No hay nada.

Es como si estuvieras en un club, con muchas actividades y deportes incluídos, Los espacios comunes son amplios y el personal muy amable. La ubicación excelente, muy cerca a la estación del tren y puedes ir caminando a todos los sitios de interés.

Todo estaba muy bien, realmente no me molestó nada.

La ubicación y limpieza

Parecía un hostel

La cercanía al centro y la atención de recepción, muy amables y atentos en todo. Muy buenas instalaciones con mucho a elegir. Repetiría sin duda

Poca variedad en el desayuno en cuestión de embutidos, más variedad y leche caliente. No se hicieron cambios de toalla ni la cama, solo recoger basura. ( No sabemos si eso era así en estancias cortas)

Ubicación excelente, a 5 min andando al Tivoli y unos minutos más a la plaza del ayuntamiento. Apenas tuvimos que coger metro. Nuestra habitación daba a las pistas de pádel y muy bien. Desayuno bien para un hotel de *** pero echamos en falta algunas cosas básicas como zumo de naranja, o algunas opciones de mermelada. Se puede desayunar tanto dentro como fuera en unos bancos que hay tipo merenderos lo cual en verano está genial. Eso sí para ir al desayuno hay que cruzas al edificio de en frente lo cual en invierno puede no ser tan agradable. Zonas comunes con juegos como futbolín, pin pon, juegos de mesa. Buena relación calidad precio-precio.

El servicio de limpieza diaria no sirve de mucho, no limpian nada… además hay detalles que no limpian ni al entregar la habitación como la plancha, el toallero eléctrico o el secador. El desagüe del lavabo no funcionaba bien y se acumulaba el agua. Yo evité lavarme el pelo.

Cercanía a la estación y precio, dentro de lo carisimos que son los hoteles en Copenhague.

La parte de recepción y entrada están renovadas, pero el resto está bastante viejo, el suelo de los pasillos deja bastante que desear. Las camas no son muy cómodas. El personal pasa desapercibido. El desayuno está hecho para nórdicos, muy poca variedad y ni siquiera había leche caliente. Está lejos del centro pero cerca de la estación, eso ya a gusto de cada uno.

La cama era cómoda y tuvimos un buen descanso por la noche

El cuarto de baño necesitaba una remodelación y en la ducha salpicaba el agua fuera de la zona de ducha. El desayuno buffet me pareció un poco flojo y no había leche caliente ni nos dieron la opción

Los espacios comunes son muy cómodos, el personal muy atento y amable.

La habitación no tiene neverita (siempre la usamos para guardar leche o yogures para el peque). El baño tenía moho entre los azulejos y eso me da manía.

Desayuno y ubicación

Baño

La localización perfecta para visitar la ciudad y sus alrededores. Hotel muy funcional

Las camas super blandas, incomodisimas. Lo mismo que las almohadas . Y mucho ruido de trenes, incluso con las ventanas cerradas, en las habitaciones que dan a las vías del tren.

La verdad no iba a poner comentario, pero al ver el de otros viajeros, que han debido de estar en otro hotel o no son reales los comentarios que han puesto me he decidido. Lo unico bueno que tiene es la ubicacion con respecto al centro.

NO me gustó el desayuno, muy pobre por ser generoso, no me gustó las habitacion familiar, muy vieja con dos literas que se cerraban solas si te sentabas y no me gustó el ruido de trenes que habia al estar tan pegado a la estación. La piscina es de pago incluso para los huespedes y en el desayuno como he dicho, además de ser muy pobre por no haber no habia ni leche caliente. En definitiva y para hacer la comparación es un dos estrellas de España, en cuanto a las habitaciones que nos tocaron y en cuanto al desayuno.

Habitaciones cómodas y buena ubicación

Hotel perfecto para familias. Los niños tienen multitud de posibilidades de juego: ping pong, dardos, futbolín, juegos de mesa... Y si se quedan con ganas, pagando un extra, hay pistas de pádel o fútbol. Desayuno sano y completo, con un ambiente animado y educado. A pocos minutos de la estación central de tren.

La habitación familiar es reducida. El personal se comporta más como en un amigable albergue que en un hotel.

La ubicación, muy cerca de la Estación Central, y del centro histórico, se puede ir caminando a la mayoría de los lugares de interés. Las instalaciones, la habitación es amplia y cómoda, el baño igual; la cama super confortable; impecable la limpieza. El hotel está dentro de un complejo con espacio al aire libre, canchas de padel, pileta, juegos. Lo mejor, el desayuno, completísimo y variado

Nada, todo perfecto!

Buena ubicación, muy cerca de la estación central de tren y del centro. Habitación amplia, camas y almohadas muy cómodas. Excelente espacio de guardado. Desayuno bueno.

Lenta la limpieza de las mesas en el desayuno. Muy poco personal para la cantidad de gente. La piscina y el gimnasio son de pago y no está indicado.