Opiniones del Hotel Cima 2 estrellas

La ubicación y el edificio.

Estaba sucio. La propietaria es muy mayor y lo lleva ella sola. No tiene a nadie contratado para la limpieza. Resultado: está muy mayor para poder limpiar en condiciones. Al quitar el edredón había tres pelos largos en la sábana. Casi como que no había cambiado la sábana bajera. La mesa de la tele llena de polvo, la moqueta (que las odio) asquerosas, quedaban migas de pan en la mesa de la habitación. En fin. Ella es una señora agradable pero creo que debería tener a alguien que haga la limpieza en el edificio. Es urgente que lo haga, hay muchos comentarios por el estilo y es una pena que se quede sin huéspedes ya que el edificio tiene su encanto.

La ubicación

Hotel viejo, descuidado, en mal estado y algo sucio.

Cerca de la estación de Zermatt

Las vistas de las habitaciones del hotel, son espectaculares. La ubicacion. Se encuentra a 3 cuadras de la estacion de tren de Zermatt. El precio es sumamente accesible. Dificilmente vas a encontrar otra estancia a ese precio en Zermatt.

El hotel es como si fuera una cabaña. Tiene lo basico: cama, una pequeña mesa, una regadera privada, una pequeña tv Aunque hay que decir que el baño es compartido. Es un baño por piso. Pero sinceramente no hay tanto problema porque son muy pocos los cuartos del hotel. No hay personal. La dueña del hotel es una señora ya mayor. Sin embargo no hay tanto problema. Cuando llegas al hotel a hacer el check in. Tu llave con tu apellido está en el "lobby" y solo la tienes que tomar y listo. Es verdad que el hotel es muy simple. Pero bueno si vas a Zermatt realmente NO es para estar en el hotel. Y este cumple con lo basico.

Las vistas. Desde mi habitación (10) se podía ver el Matterhorn totalmente y sin obstáculos.

No había ningún tipo de personal en el hotel. No había cortina de ducha y por la ventana del baño te ven los de enfrente sin problemas. La limpieza era bastante mejorable así como el mantenimiento. La insonorización acústica... ejem...

Muy bien ubicado, a menos de 5 minutos caminando de la estación de tren y del tren del Gornergratt. Nuestra habitación tenía un balcón con un par de sillas y vistas inmejorables al Matterhorn, incluso lo veíamos desde la cama. Ver cómo los primeros rayos del sol al amanecer iban iluminando el Matterhorn fue de las mejores experiencias del viaje. Además justo bajo había un jardín con mesas, muy agradable. Tanto el hotel como la habitación son muy antiguos, pero estaba todo limpio, cómodo y muy funcional.

No había ducha, era una bañera pero no tenía cortina ni soporte para colgar la alcachofa, así que el momento ducha era bastante incómodo. Por otro lado, en los 3 días que estuvimos allí no vimos a nadie del alojamiento. El check in lo hicimos a través del teléfono dónde una señora muy amablemente nos dijo la habitación que teníamos y qué llave coger. Pero ya no pudimos volver a contactar con ella. El día del check out queríamos preguntar si había posibilidad de dejar las maletas en algún sitio para hacer una ruta y recogerlas a la vuelta y allí no había nadie a quién preguntar, y los teléfonos de contacto estaban apagados. Por esa parte muy mal, muy desatendido.

Buena ubicación cerca de las estaciones de tren. Teníamos una vista muy bonita desde la terraza.

Las instalaciones son viejísimas. Necesita una renovación total urgente. Los colchones horribles , me levantaba cada día con un dolor de espalda espantoso. Las alfombras extremadamente sucias, con manchas de mucho tiempo . No había ningún tipo de cafetera, hervidor, etc … No vimos a nadie en el hotel. Al llegar, encuentras un papel en una habitación de la planta baja en la que te indican que llames a un número de teléfono y al llamar una persona te indica tu número de habitación y coges la llave. Están todas las llaves al alcance y la puerta abierta sin personal las 24 horas , así que o te llevas la llave que tiene un buen peso o cualquiera puede entrar en tu habitación. Hay pegatinas que indican que hay cámaras de vigilancia , pero no vimos ninguna … da la sensación de que está todo abandonado. No lo recomendaría. Un hotel horrible

Con una ubicación perfecta, la habitación con una vista impresionante

La vistada

Nada

No me gustó absolutamente nada.

Es un establecimiento viejo, desde que entras a hacer el checkin ya es una cosa absurda desde todo punto, tienes que llamar a través de un teléfono para decir tu nombre y te dicen el número de llave que coger. Todo esto a través del teléfono. Muy loco. La habitación en nuestro caso con baño privado un despropósito, vieja y fea, pero vieja de hace 50 años. La ducha no tenía no colgador, ni jabón de cortesía, ni champú NI CORTINA. Se escucha absolutamente todo de los vecinos, podría seguir hablando mil cosas, resumo, no os alojéis aquí. Sí, se ve el Monte Cervino y la terraza con la madera putrefacta es enorme, como en todos los hoteles de la zona se ve el monte (por cierto Zermatt lo más feo de Suiza). No daban desayuno, el único hotel de Suiza que no da. El caso he tenido que venir a uno de los países más ricos del mundo para alojarme en el peor hotel. Adjunto foto del desayuno que fui a buscar al súper a primera hora antes la ausencia de desayuno, por cierto habitación a precio muy muy europeo.

Ubicación

Nadie recibe, hay que insistir en un teléfono incómodo y con pésima luz.

La ubicación es excelente. Solo vale la pena por la ubicación

Un hotel muy viejo

Cómodo y acogedor, esas son las dos palabras que describen el hotel. Nuestra habitación tenía una vista increíble, directo a Matterhorn. Definitivamente volvería a hospedarme aquí.

Las vistas increíbles. Se ve el cervino desde la habitación. Un balcón enorme. Hotel muy bien situado

Muy viejo. Falta de mantenimiento. Necesita una reforma

Muy linda vista y cercanía con la estación de trenes

Nada

Buena ubicación, cercano al tren y al centro de la ciudad. En la pieza tienes ducha y lavamanos.

Toallas no estaban en buen estado

Las vistas de la habitación del Cervino eran impresionante. También el hotel tiene una terraza muy tranquila para estar.

La atención de su personal y la ubicación que al no estar en el centro de zermatt te evitabas el ruido y por otro lado, nosotros teniamos habitación con vistas y las vistas eran impresionantes!!!

El hotel parece sacado de la serie 'cuentame' aún así, todo funciona, el agua caliente, el WC, aunque la cama es pequeña para una persona que mide 1,90 (los pies le quedan colgando)