
De
EspañaVivo en Chile hace unos años y quisimos tener una escapada sin los niños, Nuestro plan era encontrar un lugar que ofreciera algo de servicios, pero no estar reducidos a una pequeña habitación de hotel/lodge. Y es aquí donde encontramos la combinación perfecta; toda la privacidad y espacios de una casa completa y privada para dos (decorada con mucho gusto y muy pulcra), y una excelente atención y equipamiento. En cierto horario salimos e hicieron limpieza del dormitorio, nunca tuvimos que salir a comprar cosas básicas como servilletas, aliños o azúcar, fue instalarse y disfrutar. En el refrigerador teníamos las cosas para preparar nuestro desayuno, el café es de grano, el té de buena calidad y un pan artesanal fenomenal. Nuestro quincho fue un espacio que disfrutamos mucho, el fogón estaba listo llegar y prender e incluso había un carbón en la parrilla. Los datos de restaurantes y paseos fueron críticos para lograr una experiencia memorable.